Yo creo que en la vida no merece la pena perder mucho tiempo en el “te lo dije”, aunque lo dijera, y dar respuesta certera a una situación sobrevenida que requiere que se tomen decisiones importantes para, no solo garantizar la existencia del Partido Popular, si no, para poder tener un presente que represente a muchos de sus votantes y a otros que dejamos de serlo.
Echar la culpa a los votantes por haber encontrado amparo en dos partidos de reciente creación solo hace que el PP vaya desapareciendo poco a poco como la mano de Michael J. Fox en la foto familiar de «Regreso al Futuro» cuando se rompe la relación de sus padres.
Para explicarme mejor por si no has visto la película, entiendo que Pablo Casado es Mc Fly en el pasado intentando que sus padres, en este caso liberales y conservadores, separados por el exabrupto de M. Rajoy (Bizz Tanen) que les animaba a abandonar en uno de los últimos Congreso del Partido: https://www.youtube.com/watch?v=hS-b-npsDJI, el partido, se junten.
Si no se juntan otra vez, Mc Fly muere, puesto que ya no tiene sentido la familia de la que es parte. Por lo tanto y siguiendo el símil de la película, si se quiere tener futuro, nada como trabajar para recuperar esa relación y ser por tanto casa común del Centro Derecha Reformista y Liberal, donde puedan convivir siendo un poco menos conservadores unos y un poco menos liberales otros, pero ambos con ilusión por el proyecto presentado y las personas que lo conforman. Regreso al pasado recuperando el PP de siempre, para poder tener futuro.
Después del varapalo recibido por el Partido Popular es hora de cerrar heridas y ponerse a trabajar:
Lo primero por España, motivo por el que creo que sería bueno que Pablo Casado debería anunciar la abstención de los diputados del Partido en la investidura de Pedro Sánchez. Con ello conseguiría liberar a España de cualquier tentación de chantaje independentista y así conseguir que se pueda centrar el PSOE en lo mejor para el país, sabiendo que sus políticas socialistas encontraran apoyo o bien en Podemos, o bien en Ciudadanos, pero liberado de las cadenas de los que quieren romper España. No es época de cálculo electoral, hay que tener altura de miras.
Sí es sí, sería el primer mensaje diferenciador con el pasado que marcaría una distancia, gesto que le elevaría a hombre de estado que tanto necesitamos y recuperaría el liderazgo de la oposición. Si su carrera política acabara aquí, acabaría con un gran gesto, si no, sería un gesto que podría rentabilizar en el futuro.
Lo segundo que, bajo mi humilde opinión, tiene que anunciar Pablo Casado es un Congreso extraordinario del Partido Popular para septiembre.
Con este resultado no puede aferrarse al sillón, 66 diputados es motivo de Congreso y de dar la oportunidad al Partido de recomponerse. Si quiere que se presente y vuelva a ganar, tiene la experiencia. Pero es más que necesario realizar un Congreso donde poder volver a invitar a liberales y conservadores a formar parte del equipo de gestión que tiene que llevar la ilusión a los votantes para recuperar más de tres millones de votos. No hacer un Congreso es secuestrar al Partido y llevarlo al abismo, hay que tener reflejos para recomponerlo siendo diferente al pasado.
Lo tercero que tiene que anunciar, mejor hoy que mañana, es la ruptura total con el pasado y vender la sede Génova B 13. Ese edificio gafado no representa más que el peor pasado.
Hay que recuperar y encontrar a gente brillante, algunos en Génova (no muchos), otros nuevos, otros que se fueron, que hagan «tándem» para pasar al partido por el desguace y diseñar barco nuevo, “sin tutela ni tu tías” “sin aznares, ni rajoys” que han quedado para una foto en el álbum del titanic pepero.
El nuevo barco, necesita no solo centro de mando nuevo motivado y profesional, también un centro de operaciones limpio. Se necesita incorporar a verdaderos profesionales al cuadro de mando, motivar a la gente buena de la casa, pero echar a muchos tóxicos que no suman al proyecto. Un Partido no puede estar gestionado como NNGG, hay que hacer un cambio radical.
Cuarto, No es hora para novatos, creo que Pablo tiene que hacer dimitir a todos los estrellados, para que en el Congreso estén los mejores diputados. Personas como “Adolfos”, Edurnes” y otros no deben recoger sus actas de diputados como gesto de generosidad para que otros como “Lasketis” y “Aragonéses” puedan formar un núcleo duro de resistencia. En esta legislatura la experiencia parlamentaria va a ser un grado y la posibilidad de recuperar el pulso en el Congreso fundamental para el Partido. Gracias por los servicios prestados, pero es momento de políticos profesionales que sepan jugar el partido desde el principio y no de novatos que no saben donde están los botones que tienen que pulsar.
En definitiva, muy resumido, pero muchos deberes.
Estamos ante un momento en el que el líder, sea quien sea, tiene que empezar a tocar Johny be Good, si no, pronto escucharemos el réquiem de Mozart y el Partido Popular habrá desaparecido.
Regreso al Futuro: Johny be Goode
PD: Hay algo que sí quiero dejar claro, hace años pensé que esto iba a pasar y me dejé la vida para que el PP no se rompiera, puesto que ya sabía que la fragmentación del voto del centro derecha era nefasta, pedí que se renovara el Partido, Congresos, nuevas caras, nuevos proyectos que ilusionaran y no me hicieron ni caso. Hoy si vuelvo a escribir es con la misma intención, quiero que el PP gane, y quien no lo vea, a lo mejor es que sigue mirándose al espejo y se ve vestido…